Dedicado a la GRAN FAMILIA BANESTO y SAN en martes y trece
¡Pero qué buenos ratos!
Un grupo de compañeros y amigos jubilados, prejubilados y en activo del mítico Banesto, hoy San, nos hemos ido de excursión hace unos días a Peñafiel, al mismo corazón de la Ribera del Duero, una de las zonas vitivinícolas más importantes del planeta azul, para saborear y disfrutar de nuestra amistad y admirar una parte de nuestra querida España. Por cierto, en esta y otras zonas, nuestro Banco acudía siempre a financiar las ayudas PAC y las subvenciones para reestructurar el viñedo en Castilla y León, procedentes de Bruselas.
Fue el pasado sábado 26 de septiembre. Estuvimos visitando y paseando la histórica plaza de Peñafiel y sus monumentos; después nos restauramos con unas ensaladas, ibéricos, lechazo, Ribera del Duero, postres, café y dulces. En la gran bodega del Restaurante Arzuaga había escritos en las barricas varios dichos populares, y tomé nota a vuelapluma de algunos que platicaban de la siguiente guisa: - Al cuerpo hay que darle lo contrario de lo que quiere: si pide agua, darle vino, y si pide vino... ¡darle más vino!; Amigos, oros y vinos, cuanto más viejos, más finos.; El buen vino resucita al peregrino. ¡Estaba escrito!
Fue un día excepcional, de compañerismo, amistad, tertulia, anécdotas, bromas, manteles y visitas a la monumentalidad de aquella histórica villa... ¡Hasta pronto amigos!
PS. El autor de este fenomenal video es nuestro querido amigo y compañero de viaje, Antonio Orejuela, quien me lo hace seguir para su publicación en este post. ¡Que lo disfruitéis!
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